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Mostrando entradas de 2015

La CADE, entre Caracas y Zúrich

El desarrollo de las sociedades es inversamente proporcional al efecto de la política en el presupuesto de una familia promedio. Cuando las políticas gubernamentales son decisivas en la supervivencia, estamos indefectiblemente ante una economía gravemente dependiente del Estado. Y al contrario, si las promesas electorales no afectan inmediatamente al ciudadano de a pie, lo más probable es que observemos desarrollo y estabilidad. Esa es la diferencia entre vivir en Caracas o en Zúrich. Entre la actual Venezuela que destruye la economía de los ciudadanos y subsidia a millones de familias, y Suiza donde todo es predecible y se debate sobre seguridad internacional. La política es buena, pero mejor cuando intermedia valores y no los comestibles de la semana. Por eso debería resultar extraño que algunos medios critiquen las exposiciones de Alan, Keiko y PPK en la CADE, quienes destacaron no solo por exhibir seriedad y conocimiento, sino también por garantizar la continuidad del modelo c

El mito de la falta de candidatos

Decenas de columnas de opinión, titulares y caricaturas, nos quieren convencer de que peligra la patria por los intolerables defectos de los principales candidatos. La idea es crearnos la necesidad de un candidato imprevisto, diferente, que nos sorprenda e ilusione. Y claro, todos quisiéramos votar por un encantador John F. Kennedy, una firme Margaret Thatcher, o un astuto Felipe Gonzáles. Y solo tenemos, al parecer, a cuatro cuyas debilidades son exhibidas cotidianamente por los medios de comunicación, quizás con la esperanza de crear los mismos espacios que luego son cubiertos por aventureros providenciales que terminan censurando la libertad de prensa. Desde 1931, los principales candidatos presidenciales no garantizaban, como ahora, la estabilidad del régimen político, la seguridad jurídica, ni la continuidad de un modelo económico exitoso. La campaña electoral continuamente recurría al temor a lo desconocido, al discurso de la destrucción de las reglas existentes. La publicac

Los Viejos Partidos

Hablar de fortalecer las instituciones, en el Perú actual, es tan productivo como vender catecismos en Letras de la PUCP. Nadie entiende cuál es su utilidad. Recordemos al Defensor Lima del magnate pesquero Banchero, cuyo asesinato puso rápido fin a un equipo que solo obtuvo éxitos mientras le duró el dinero de su mecenas.  Si lo comparamos con Universitario o Alianza, de profundo arraigo social, importante trayectoria deportiva y estructuras de menores, resulta obvio que es preferible apostar a un  fútbol con instituciones permanentes y  de larga trayectoria deportiva. En política, la diferencia entre un partido y un movimiento es, esencialmente, la vocación de permanencia, una posición doctrinaria a la cual anclar los programas, y la necesaria formación de dirigentes juveniles. Ambas opciones presentan sus candidatos a los electores, pero mientras unos tienen la garantía de una marca reconocida en el mercado, los otros vienen con un brilloso empaque multicolor, bajo una denominaci

Un nuevo Presidente pero el mismo Congreso?

La nueva composición del Congreso determinará la posibilidad de hacer las modificaciones constitucionales y legales que necesita nuestro régimen político. La labor parlamentaria seguirá necesariamente la visión ideológica de la nueva mayoría. De allí la importancia de confeccionar las listas parlamentarias con personas con formación política definida. En la presidenciales de 2016 solo triunfará solo un candidato. Pero el proceso electoral nos dejará esencialmente, cinco bancadas, que corresponderán a Fuerza Popular con fujimoristas de la antigua guardia y de nueva cosecha, Alianza Popular con militantes apristas y pepecistas, y un tercer grupo proveniente de las pequeñas coaliciones de izquierda marxista. A ellos se sumarán las individualidades que hayan reclutado PPK y Acuña, que solo lograrán mantener cierta cohesión si su caudillo logra ingresar a Palacio de Gobierno, de lo contrario, paulatinamente se desprenderán del rigor colectivo para negociar su asimilación a nuevos grupos

Cuando no queremos ser mejores

En el almuerzo familiar o en la sesión del Congreso, no hay lugar donde no se hable de la necesidad de mayor calidad educativa, sin embargo, siguen en aumento las matrículas universitarias a 300 soles Medicina o 200 Administración. No es necesario esperar una evaluación internacional para saber que enviamos a nuestros hijos a lugares donde no encontrarán profesores con conocimientos actualizados y especialidad definida. Donde el nivel de exigencia será bajísimo para no desaprobar a nadie por no perder un cliente.  Los matriculamos en garajes y galpones porque, en el fondo, sabemos que no podrían competir con estudiantes que estudien de verdad, ni llegar a graduarse en facultades que exijan un estándar mínimo de habilidad académica. Entonces, hay una mediocre oferta educativa que el mercado no logra expulsar y  también  hay una importante demanda que requiere productos de muy baja calidad. Es obvio que así como no hay buenos profesores universitarios para 140 universidades  tampoc

Lote 192, presente griego para Petroperú

La gran apuesta de Petroperú era repotenciar la Refinería de Talara, para lo que necesitaba 3 mil millones de dólares, obviamente en alianza con empresas privadas, consientes del respeto hacia la inversión privada que el modelo económico peruano ha demostrado en los últimos 20 años. Contaba además, con el decidido apoyo de Palacio de Gobierno, necesitado de asegurar un legado de cara a su futuro político. Pero el Congreso en una abultada votación destruyó, quizás definitivamente, la ilusión estatista al aprobar un proyecto de ley que quiebra la delicada estabilidad jurídica consagrada en la Constitución Económica vigente, fruto del acuerdo fundamental de la Asamblea Constituyente de 1978, de su evolución a través del la Carta de 1993 y de la importante jurisprudencia constitucional. Obviamente, ningún inversionista pondrá un dólar de la banca norteamericana y europea en un mega proyecto con una empresa estatal cuya actividad se decide en las calles, por la turba, en un período

Nuevo rostro para el comunismo peruano.

El totalitarismo marxista tuvo momentos de auténtico poder e influencia mundial. Cayó en descrédito por los pésimos resultados sociales y económicos que obtuvieron sus variados modelos, a pesar de haber sacrificado hasta el extremo libertades y derechos de sus ciudadanos y provocado la muerte de cientos de millones de personas, en campos de concentración, purgas políticas y salvajes carestías. Sobrevive el comunismo saciando su necesidad de concentrar el poder disfrazándose en demagogia populista y asistencialista. Su fuente de vida es la pobreza y la falta de educación. Nuestro país conoció las recetas de sus admiradores, el Estado empresario y la sustitución de importaciones, la planificación estatista y el recorte de libertades políticas y económicas, desconfianza hacia el emprendedor y mucho poder para el burócrata. Tras duras experiencias fuimos aprendiendo a valorar los pocos, pero importantes Acuerdos Fundamentales elaborados al interior de nuestra comunidad política, actual

¿Evaluación? No gracias

Un importante sector de izquierda es enemigo de las evaluaciones. Consideran que los empleados no deben ser sometidos a una evaluación de su desempeño porque, de alguna manera, medir su capacidad atenta contra sus derechos. Más importante que ser realmente útil es conservar el puesto de trabajo durante toda la vida. Por donde se mire,  hay maestros de escuela o empleados del ministerio, profesionales y secretarias, que desearían tener la propiedad de sus puestos indiferentemente a la eficiencia de su labor cotidiana. No les quita el sueño el beneficio del usuario o consumidor ya que, se supone, los sistemas y las entidades tienen por finalidad satisfacer los intereses de los ciudadanos y no al revés. Aplauden cuando descubren que en Finlandia o en algún otro rincón del mundo, anuncian que no se tomarán exámenes en los colegios. Aspiran eliminar los puntajes, las medallas, los cuadros de honor. En cuanto pueden, prohiben los exámenes de destreza y habilidad para acceder, por ejemplo

La falta de arte en la política

La política, como cualquier profesión, exige en quien la ejerce un conjunto de cualidades para lograr el éxito y mantenerse en la actividad. Una de ellas es la templanza, que consiste en el control del carácter y de las emociones. Cualquier exteriorización, vía palabra o gestos, debe ser calculada y responder a una estrategia coherente con los objetivos perseguidos. El político debe asumir un rol conforme a las tendencias de sus representados, de sus electores o de su potencial mercado electoral. Así como al ingeniero se le supone ducho en matemáticas, al médico indiferente a la sangre, o al equilibrista amante de las alturas, el político ejerce una profesión que supone vivir permanentemente en una gran obra teatral, -de graves consecuencias para los ciudadanos-, en la que miles o millones de espectadores siguen los diálogos y actitudes de su personaje preferido, siendo la política un verdadero arte: el de generar identificación y confianza. Por ello extraña que las noticias nos prese

Hugo Neira y los conservadores

Sus reciente reflexiones han puesto en la agenda académica el debate sobre la vigencia de los postulados esenciales de la derecha y de la izquierda en el Perú, lo que permite refrescar viejos catecismos y frases vacías.  Esbozo unas líneas aquí, en torno a la tarea pendiente de la derecha en el Perú. El conservadurismo parte de la defensa de una verdadera ética del trabajo, que exalta el esfuerzo personal como instrumento para alcanzar, con la suma de virtudes individuales, el anhelado desarrollo de la sociedad. Pero ello requiere de electores de talante moderado, suspicaces con los cambios, pues constituyen clases medias con disfrute de propiedad inmueble y cierto estándar de satisfacción de necesidades básicas, lo que en nuestro país no se cumple. Aristóteles ya explicaba la relación entre la estabilidad política democrática y la necesidad del ciudadano de proteger sus bienes y estatus. Neira observa que el ciudadano emergente es individualista y desconfía de las instituciones p

La Cuestión de Confianza en clave electoral

El juego democrático entre la negativa de confianza al gabinete y la disolución parlamentaria obedece a la lógica de la forma de gobierno parlamentarista, propia de la Europa desarrollada, pero supone la solidez del sistema de partidos, pues los diputados de la cámara disuelta deben sentirse respaldados por su partido político, que los ha de volver a presentar como candidatos en su correspondiente distrito electoral. La amenaza de hacer cuestión de confianza del otorgamiento de facultades para que el gobierno emita decretos legislativos en materia económica y de seguridad, está directamente ligada a la severa crisis de la representación política de nuestro Congreso: posiblemente la mayoría de los actuales congresistas que no están directamente vinculados al oficialismo, no tendría ninguna seguridad de encontrar lugar en alguna lista en las elecciones que tendrían que realizarse dentro del plazo de cuatro meses, a partir de la disolución y, aunque les garanticen un número, nadie pue

El complejo de Abel

Los sacrificios de Abel eran gratos al Señor, los de Caín en cambio, no eran propicios al Divino. Así, los seres humanos aprendemos en la infancia que hay buenos y malos, el blanco y el negro. Luego, crecemos sin madurar y los medios nos muestran solo a enardecidos representantes de posiciones extremas, cada una reclamándose depositaria de la verdad, regodeándose en su discurso radical y panfletario. Así, desfilan ante nosotros temas delicados como el aborto luego de una violación o la pretensión de minorías sexuales de obtener reconocimiento legal, problemas que merecen una reflexión seria y razonada pero en cambio, encontramos el reiterado y mecánico dogma o eslogan, sin que nadie trate de negociar y acordar nuevas reglas, sencillamente porque vivimos en una sociedad donde no se reconoce ninguna validez a la posición intelectual del adversario. La lógica es atroz: si yo tengo toda la razón, mi adversario no tiene ninguna, por tanto, resulta imposible tolerar su perorata, impensa

Ética antiminera

La protesta de los izquierdistas porque Santillana les atribuyera una convicción compartida de impedir el desarrollo de la industria minera, resultó tan patética y falsa como la negativa de la vieja derecha pradista, cuando se le increpaba su servilismo mercantilista a la banca privada. La legítima pretensión de cuidar el medio ambiente y los recursos naturales de los que depende la agricultura han sido secuestrados por grupos organizados y bien financiados de marxistas radicales, que hace una década estaban ocupados con el activismo en derechos humanos y organizando eventos para el fortalecimiento de la democracia. En realidad no pudieron elegir, son las ONG norteamericanas y europeas las que descartaron seguir destinando ese tipo de ayuda al Perú, pues consideraban con razón que el sistema político se había consolidado, apostando más bien, al deseo egoísta de preservar el denominado Bosque Amazónico, para que sirva de equilibrio a las ciudades e industrias del mundo desarrollado.

Con la cara pintada.

Hubo una vez, un Presidente democrático que designó como líder de su Consejo de Ministros al entonces líder de la oposición, don Pedro Beltrán. Qué lejos han quedado esos reflejos y esas formas. El nuevo Premier irá con la cara pintada a un Congreso despartidarizado, incapaz de articular una respuesta orgánica al reto presidencial: la mitad no sabe en qué lista podrá tentar la reelección, y la otra mitad tiene serias dudas si su postulación tendrá la luz verde de sus dirigentes. Las elecciones parlamentarias anticipadas en agosto serían una apuesta inaceptable para el congresista promedio. Siendo esta la situación, la oposición tendrá que otorgar el voto de confianza al nuevo Consejo de Ministros con el discurso del interés nacional, y luego, podrá recién pasar la factura de la afrenta recibida: en julio elegirá una mesa directiva de oposición en el Congreso, y en un segundo momento, ya en agosto y sin el fantasma de la disolución, planteará la censura al gabinete. Lo saben en

Libertad de sufragio y asistencialismo estatal

Es posible que para usted, amigo lector, la política no signifique en este momento un asunto de vital interés, su supervivencia está garantizada, mal o bien, por su esfuerzo cotidiano, por su trabajo en una oficina o comercio, porque sus estudios le dieron la posibilidad de adquirir habilidades y competencias que tienen un cierto valor en el mercado: le pagan por realizar algunas actividades y ello le permite ir desarrollando un determinado proyecto de vida.  Si en 2016 gana la presidencia Alan, Keiko, Urresti o Peluchín, a usted no le afectaría demasiado, salvo por las simpatías o antipatías que le puedan suscitar dichos personajes. Pero podría ya haber dos o tres millones de peruanos a quienes las elecciones resultan cruciales para merecer su inclusión o mantener el goce de alguno de los programas sociales que el Estado implementa, con distinto nivel de efectividad, para paliar la pobreza y las consecuencias de una educación pública que no enseña  habilidades ni competencias neces

Tiempo de insultos, cuando la solución es lo de menos

La primera derrota política de la Unión Civil fue la de no ofrecer su propuesta como una alternativa moderada y razonable, frente a una importante mayoría contraria a que las relaciones homosexuales logren su formalización a través del matrimonio igualitario. De inicio, la iniciativa fue presentada como una acción táctica destinada a ser solo un impulso para  mayores avances, las acciones de propaganda fueron efectuadas en medio de desfiles carnavalescos con personajes travestidos y pintarrajeados o en la Catedral de Lima en ejercicios de romance homosexual masivo.  Como si su jefe de campaña fuese en realidad un espía. En este momento nadie duda de lo que hay detrás: el matrimonio entendido como un contrato donde las partes acceden con libertad, sin que constituya requisito el bíblico mandato de hombre y mujer.  Así las cosas, reconozcamos primero que es legítimo que cada ciudadano quiera hacer que su interés, pensamiento, opción, prejuicio, temor, ilusión, sea recogida por sus rep

Economía social de mercado

Demócratas y Republicanos debaten permanentemente sobre el nivel de intervención del gobierno en la economía, toman medidas con pragmatismo y conforme a la coyuntura. Los alemanes en cambio, prefirieron sistematizar el tema. Konrad Adenauer y Ludwig Erhard lideraron un país destruido por la guerra y debieron establecer las reglas para cuando el Estado regule el mercado.   Como es lógico, partieron desde los postulados de su propia formación, la Doctrina Social de la Iglesia, para rechazar tanto al capitalismo sin compromiso social y como a la planificación central del modelo marxista-leninista. La dignidad de la persona exige evitar la explotación del hombre por el hombre y del hombre por el Estado. En un mundo sumergido en la Guerra Fría y la bipolaridad, propusieron la Tercera Vía.   La Economía Social de Mercado parte entonces del reconocimiento de la libertad de la persona, de su iniciativa y emprendimiento, que no admiten más límites que los que resulten de su compromiso con
Empleo juvenil, ¿a cualquier precio? Si la lógica de la ley de empleo juvenil fuese cierta, sería posible suspender todo acuerdo o convenio por el cual la mujer ejecutiva pueda exigir bonos de productividad, utilidades de fin de año o dietas por sesiones, a fin de incentivar su ingreso a los directorios de las grandes empresas. Las personas discapacitadas podrían multiplicar su presencia en el mercado laboral si se estableciera legalmente que cobren la mitad del sueldo por jornadas más prolongadas. Las posibilidades son innumerables, siempre protegidas por la bondad de la finalidad anhelada. Claro, no es necesario ser constitucionalista para entender que no es posible recurrir a tales incentivos, pues el estado constitucional no admite la discriminación en razón de la edad, el género o la capacidad física, solo es posible la diferenciación sustentada en la racionalidad y la proporcionalidad. Tampoco es necesario ser economista para darse cuenta que es imprescindible reducir lo
"El Colegio Mayor y la Igualdad de Oportunidades" A pesar de haber enfrentado la resistencia inicial de este gobierno, la experiencia del Colegio Mayor, como prueba de que la educación pública puede ser eficie nte, resulta sumamente positiva y paradigmática. La idea central es romper el círculo vicioso por el cual el hijo de pobres queda condenado a ser pobre también, por no lograr acceder a los conocimientos que, en principio, requieren un profesor capacitado, motivado y bien remunerado, además de la infraestructura adecuada y los medios tecnológicos compatibles con un moderno proceso de enseñanza-aprendizaje. Todo ello, accesible tan solo a través de una costosa pensión de enseñanza en colegios privados de élite. El principio de Igualdad de Oportunidades pertenece a la esfera del Estado Constitucional de Derecho, donde la educación en todos sus niveles, responde a los principios y valores contenidos en la Constitución material. Así, si bien puede aceptarse las diferencias
" El Estado Gerontocrático"   Si Tocqueville llegara a nuestras costas para conocer nuestra sociedad, se asombraría de que los jóvenes no asumieran una abierta postura revolucionaria contra un Estado anciano y ajeno, que ha venido tejiendo una telaraña legal contraria a los intereses naturales de la juventud, en férrea defensa de la gerontocracia. Hubiera advertido que la educación pública escolar no enseña habilidades suficientes como para garantizar al alumno una preparación que le conduzca a la universidad o la instrucción técnica, o tan solo para desempeñarse en un puesto de trabajo no especializado, ni siquiera para comprender a su propia sociedad en función a un pensamiento crítico sobre el complejo pasado histórico, el mestizaje como fuente de la identidad nacional. No hubiera tardado en averiguar la casi inexistencia de una educación técnica de calidad, al alcance de los inteligentes y hábiles no dispuestos a consumir muchos años entre libros y teorías. Claro,